Madrid, cuestión de estilo

Madrid vive una explosión en torno al interiorismo. A la vista, también ofrece sorpresas (©José Barea, MD).

Creo que un «hola a todos» es la mejor presentación; es lo que digo cuando voy a los sitios y tengo que saludar a mucha gente. Y es que, por cierto, últimamente está todo abarrotado… Definitivamente, hay que liberar espacio. De eso precisamente quería hablaros, de Madrid y de interiorismo.

El Anticuario de Belén y Colección Privada participan juntos en DecorAccion (hasta el domingo 8 en el Barrio de las Letras).

Esta ciudad ha vivido, a mi parecer, un importantísimo punto de inflexión: el mismo momento en que nos dimos cuenta de que ese punto añejo que tiene Madrid, su color y ese olor a siglo XIX, puede ser divertidísimo. Se puede jugar con esta ciudad como con pocas. Desde luego que la propia arquitectura de la ciudad invita a ello pero el tomar consciencia de su potencial es lo que ha llevado a la proliferación de una cantidad de artistas dedicados a la decoración y al interiorismo que, sin exagerar, podríamos llamar explosión cultural.

El interior del Only You, hotel de moda en Madrid, es realmente sorprendente.

Y es que, además del Rastro, son ya muchos los lugares donde empezamos a hacer ruido como el Barrio de las Salesas. Barrio que, aunque vivo en Malasaña, he tomado ya como mi casa. Pero no sólo eso, están también los chicos de Brut, con una visión muy limpia y estructurada de las cosas, Lorenzo Castillo, Colección Privada, los anticuarios de toda la vida, como el Anticuario de Belén… Creo que la mezcla de todo ello está quedando muy, muy chula.

El Museo Cerralbo es una de esas maravillas que merece la pena descubrir (©Madrid Destino).

Pero no solamente hacen falta buenos profesionales, sino clientes y compradores. Personas que inviertan en el interior. Algo que, hasta hace muy poco, escaseaba en nuestro país y que en Madrid lleva años cambiando. Maravillas como el Museo Cerralbo, donde comisariamos una exposición de cerámica contemporánea (tengo que decirlo, la mezcla de siglos XIX y XXII quedó espectacular), son un placer para los sentidos.  El patio del Hotel Only You, en Barquillo, es otro de mis preferidos. También, el Casino de Madrid o el Dry Martina y, por supuestísimo, el Círculo de Bellas Artes, tanto por su arquitectura como por las exposiciones y las vistas desde su terraza. No sé, lo divertido de Madrid es que entras para una caña y acabas a gin tonics. ¡De ahí la importancia de la decoración!

Resulta fácil encontrar un motivo para detenerse y tomar algo en el Dray Martina.

En España y en esta ciudad no hay una forma concreta de decorar. Lo que sí creo que es común denominador es que lo hacemos sin prejuicios, hacemos lo que nos da la gana sin importarnos mucho si seguimos o no las reglas. Y eso, para el interiorismo creativo es fundamental. Yo, particularmente, entono un ¡NO! a las etiquetas. Tampoco a las LGTB; la decoración no es ni ha sido nunca un patrimonio gay.