Los buñuelos de Nunos

Colección 2013 de buñuelos. Pastelería Nunos

La tradición de los buñuelos se remonta a la época de los moriscos, que ya los elaboraban sin rellenar y bañados en miel. Una vez expulsados de España estas recetas pasaron a los gitanos, quienes contribuyeron a que llegaran hasta nuestros días. Los hay de varias clases, aunque los buñuelos tradicionales madrileños son los de viento, llamados así por lo esponjosa que queda su masa, a base de agua, azúcar, harina, leche y huevo, al freírla en abundante aceite caliente. Actualmente nos hemos acostumbrado a tomarlos rellenos de sabores (nata, crema, chocolate, cabello de ángel y batata). En Madrid se consumen por estas fechas, las de Todos los Santos.

Buñuelo de Coca Cola. Pastelería Nunos

Algunos creerán que esto de ser pastelero me viene por tradición familiar, ya que mis padres tenían una pastelería en Toledo. Y es cierto que desde pequeño me he criado entre harinas, huevos, mantequillas, levaduras, vainillas, chocolates y frutas de todo tipo, pero también es cierto que en su momento decidí estudiar Arquitectura Técnica. También se hace cierto eso de que la cabra tira al monte y, en su momento, los aromas dulces y las masas fermentando volvieron a llamarme, y no tuve más remedio que montar mi primera pastelería en Madrid. Como, pese a todo, nunca he estado de acuerdo con las recetas  de pastelería clásica en las que por necesidades de conservación se abusaba del azúcar y de las grasas, un día me puse a pensar y a discurrir. Y es que mi vena creativa me exige divertirme con mi trabajo todos los días… Por eso hace mucho tiempo decidí que cada año, al igual que los grandes diseñadores de moda crean colecciones de primavera-verano, otoño-invierno, yo podría hacer lo mismo.

Buñuelo de Red Bull. Pastelería Nunos

En el caso de los buñuelos he creado colecciones tan divertidas como la de Postres Regionales. Recuerdo todavía cómo la gente se sorprendía cuando probaba un buñuelo de tarta de Santiago o un buñuelo de leche frita. Pero como cada año hay que innovar y buscar la inspiración, el año pasado, sin ir más lejos,  profundicé entre mis recuerdos de infancia e hice una de las colecciones mas entrañables, la Colección de Buñuelos de Chuches,con sabor a algodón dulce, chupachups, lacasitos, chicle y regaliz.

Buñuelo de yogur líquido. Pastelería Nunos

En este 2013 en Nunos hemos querido dar un paso mas. Me gusta pensar en las caras de sorpresa que pone la gente cuando da el primer mordisco. Así que este año, hemos dado una vuelta de tuerca y presentamos unos buñuelos líquidos, tan líquidos por dentro que en el momento en que los muerdes te explotan en la boca. Los hay de Cola Cao, de leche merengada, de yogur líquido, de horchata y de mandarinada. Sí, como la limonada pero con mandarinas.

Buñuelo de mandarinada. Pastelería Nunos

Pero no contento con esto, este año se me ocurrió hacer una barbaridad mayor. Cogí una botella de vermut e hice un buñuelo de vermut al que además le puse una aceituna. Cuando Puerto, mi mujer y  una de mis mayores fuentes de inspiración, lo vio me dijo que estaba loco y me criticó por hacer un buñuelo que ya no era dulce, sino salado. Ferran Adrià dijo que la línea entre lo salado y lo dulce era tan delgada que era fácil traspasarla y divertirse. Así que después del buñuelo de vermut se me ocurrió uno de sidra, otro de Red Bull, un buñuelo de Coca Cola, otro buñuelo de cerveza y uno de gin tonic. Así hemos creamos una colección que no olvidará nadie: Buñuelos Líquidos Explosivos para el aperitivo.

Buñuelo de Colacao. Pastelería Nunos

¿Cuántos no hemos robado un buñuelo de la bandeja que llevábamos a casa y luego hemos  tenido que recolocarlos para que no se notara? Je, je… Esto es un poco lo que pretendo: sacar una bandeja de buñuelos al inicio de la comida, que nos miren raro, nos pregunten de qué son, que podamos tomarnos uno de cerveza con un taco de queso, o uno de sidra con unas patatas, o uno de vermut con aceitunas. Cuando creo, busco que la gente se divierta, que la gente vea la innovación, que cuando lleve una tarta a casa pueda sorprender a los comensales, que cuando dentro de un tiempo alguien piense en un roscón de reyes no piense siempre en el mismo relleno. Sin llegar al absurdo ni al ridículo y sin romper con la pastelería tradicional, lo que buscamos es que el cliente se divierta y que cuando visites nuestra  pastelería Nunos, en la calle Narváez, 63, te sientas en un mundo de sensaciones, de placeres, de guiños y de trampantojos de forma que la pasión que nosotros sentimos por lo que hacemos te llegue a ti  y a los tuyos.