¡Al rico roscón!

Roscones de la Antigua Pastelería del Pozo (©Madrid Destino)

Los hay clásicos, rellenos con nata, de trufa… Y, lo mejor, se pueden degustar durante todo el mes de enero. Para que triunfes en casa el día 6 y el resto de días con un buen roscón de Reyes, hacemos un recorrido por esas pastelerías de imprescindible visita en estas fechas.

¡Con las manos en la masa! Así son los roscones antes de degustarlos (©Madrid Destino)

Tengo que confesar que lo que más me gusta de las Navidades es el roscón de Reyes. El turrón tampoco está mal, pero para mí no hay nada comparable a tomarse un café, o un chocolate, y acompañarlo de este tradicional dulce cuyo origen se remonta, según algunos historiadores, a las saturnales romanas, fiestas dedicadas al dios Saturno con el objeto de que el pueblo pudiera celebrar los días más largos que empezaban a venir tras el solsticio de invierno. En cualquier caso, en España, la referencia más antigua se sitúa en el siglo XIV, en el reino de Navarra, donde en el hoy tradicional bollo ya se introducía un haba. Al niño que la encontraba en su interior se le designaba rey de reyes por un día… En la época actual, si te toca lo suyo es que pagues el roscón, mientras que si te toca la figurita se supone que la suerte está contigo.

Todo un clásico de Madrid: los roscones de la Antigua Pastelería del Pozo (©Madrid Destino)

Me resulta muy difícil recomendaros solo un lugar para triunfar el día 6 y repetir y repetir los días siguientes. Me gustan, mucho, los que salen del Horno de San Onofre, todo un referente de Madrid, fiel a la tradición más pura, y los de la Antigua Pastelería del Pozo, que son sin relleno y sin fruta, solo con almendra picada y azúcar. Un consejo: ¡reservarlos con tiempo! Las colas para conseguir uno en cualquiera de estas dos pastelerías pueden ser de aúpa.

Perfecto para princesas. Así son los roscones con nubes de Levadura Madre

Para los más clásicos siempre quedará Mallorca, que los elaboran siguiendo la misma receta artesana desde el año 1931. Quienes quieran algo más moderno pueden acercarse hasta alguna de las tiendas que Levadura Madre tiene repartidas por toda la ciudad, donde los elaboran ¡rellenos de nubes! Y también con doble de azúcar o cubiertos de lacasitos… aunque, aquí, lo mejor es que puedes adquirir un kit para elaborar tu propio roscón. ¿Y qué contiene? Pues un kilo de harina de fuerza, un frasquito de agua de azahar, almendra laminada, azúcar, levadura seca y un paquete de fruta escarchada variada (naranja, guinda y calabazate).

De galleta crujiente, de crema tostada de limón… Los roscones de Nunos son todo sorpresa

Por cierto, hay quien sostiene que las frutas escarchadas que se le ponen al roscón por encima simulan las joyas de los reyes… Si sois poco tradicionales, os recomiendo pasaros por Nunos, donde el maestro entre maestros José Fernández, presenta este año cinco dulcísimas sorpresas: el Roscón Babá, emborrachado en salsa de chocolate y mandarina con Grand Marnier, el Roscón Streusel, de galleta crujiente, el Roscón Soufflé, con crema tostada de limón, y el Roscón Tatin, con crema de manzana y canela.

Roscón de cacao con ganache ligero de chocolate negro y dados de naranja confitada de Mamá Framboise

Siempre jugosos, tiernos y llenos de sabor son los roscones de Mamá Framboise, donde los elaboran con masa brioche aromatizada y de fermentación larga para garantizar esponjosidad y aromas. Los hay clásicos, con pasta de frutas y crumble de almendra, y otros más sofisticados, como el MF, de frambuesa, el Apricot, con pasta de frutas de albaricoque, y el de chocolate, que es, sencillamente, espectacular.

Los Bocados de Roscón de Vait son mini roscones con el mismo sabor pero sin agujero

Y para terminar… una recomendación que les va a gustar especialmente a los que, aunque son golosos, no quieren caer en los excesos. Las pastelerías Vait han inventado este año los Bocados de Roscón, que no es otra cosa que una especie de roscón mini, elaborado con la misma receta que el original relleno de café, chocolate con naranja, fresa… Eso sí, ¡no tienen agujero! Sea cual sea vuestra elección, disfrutad del roscón en buena compañía… y, sobre todo, ¡feliz año!