Entre mis cosas favoritas, además del pastel de manzana o de los bigotes de un gato, está el musical. Así que no he perdido la ocasión de acercarme al Teatro Arteria Coliseum de la Gran Vía para ver Sonrisas y lágrimas. El director Jaime Azpilicueta ha conseguido crear un espectáculo nuevo, sin la caspa que a veces oculta la belleza de las cosas antiguas y con la popular versión cinematográfica de Robert Wise, protagonizada por Julie Andrews, siempre presente. Lo mejor: la música de Richard Rodgers, que nunca ha pasado de moda. Aquí os dejo con el clásico Do, re, mí.