El góspel más auténtico en el Palacio de Cibeles

©Coro Góspel Living Water

Cuarenta voces que estremecen cuando interpretan una música que nació del sufrimiento de generaciones de esclavos afroamericanos. El coro español Góspel Living Water lleva doce años llevando a los escenarios de dentro y fuera de nuestras fronteras el góspel más auténtico. Junto a artistas consagrados, ofrecen un espectáculo que transporta a los espectadores a una atmósfera de libertad. El 13 de abril, el Auditorio Caja de Música del Palacio de Cibeles recibe a esta formación en un concierto solidario, cuya recaudación será destinada a un comedor social de Vallecas.
En esta familia musical hay tenores, sopranos y contraltos, voces que dirige desde sus comienzos Susana Fernández, alma y fundadora del coro con Samuel Álvarez. Al salir al escenario, los artistas convierten el espectáculo en una fiesta porque, además de cantar, bailan y llevan a cabo coreografías e improvisaciones. La cantante más joven no llega a los veinte años y el mayor ronda los cincuenta y cinco. Al escucharles es fácil que la mente vuele a una iglesia de Harlem en Nueva York.

©Coro Góspel Living Water

La música en directo es otra de las características de Góspel Living Water. Ocho maestros acompañan al coro con un abanico de instrumentos, en los que destacan teclados, guitarras, saxo y percusión. Les avala una trayectoria profesional que les ha llevado a los teatros más importantes del país y a actuar en otros eventos multitudinarios. Hace dos años recibieron a la Cabalgata de los Reyes Magos en la plaza de Cibeles.

En esta ocasión su concierto no será a las puertas de la sede del Ayuntamiento de Madrid, sino en su interior, en un nivel subterráneo del centenario edificio, debajo de la Galería de Cristal. Ahí se encuentra el Auditorio Caja de Música, el espacio perfecto para la celebración de conciertos y presentaciones gestionado por Madrid Destino.

La difusión de la música góspel es uno de los objetivos de esta formación musical, que no sólo acerca al público temas tradicionales, sino que presenta nuevos trabajos. La experiencia resulta vibrante, y en palabras de su directora, Susana Fernández, “es un río de agua viva, un mensaje de esperanza, con fuerza y pasión, para afrontar momentos duros de la vida”.

El concierto del 13 de abril es una oportunidad para que el público madrileño conozca de cerca el góspel, esos lamentos de esclavos del siglo XVIII que no quedaron en el olvido y se convirtieron en notas de pentagrama.