Función de invierno

Cirque du Soleil. Luzia.

Diciembre es el mes del año con más estrenos. Los días de fiesta y las tardes en las que el sol se pone a las 18:00h son la mejor excusa para meterse en un teatro. Aquí va una selección de espectáculos que durante las próximas semanas pueden verse en Madrid.

Cuando las canciones dejan de hablar de nosotros
Teatro de la Vida (Arganzuela, 12). 8, 11, 15, 18, 20, 21 y 22 de diciembre a 19:30h
Julio Béjar

El joven dramaturgo Julio Béjar, que el año pasado obtuvo el premio para autores nóveles Calderón de la Barca del Ministerio de Cultura con Empieza por F, nos propone una experiencia de teatro inmersivo en la casa donde él mismo vivió con su expareja. Cuando las canciones dejan de hablar de nosotros retrata por dentro y de fin a principio las fases por las que atraviesa una relación amorosa: desde el reencuentro de los antiguos novios hasta el momento en el que se conocieron en mitad del confinamiento domiciliario. Algo de la claustrofobia que experimentamos entonces se ha colado en esta pieza inflada con el aliento de la vida, no sólo por el naturalismo del espacio en el que se desarrolla sino por la verdad que expresan conversaciones que todos hemos tenido alguna vez. La acción sucede en el interior de un piso del Rastro que los espectadores recorremos minuciosamente con ojos de voyeur. A veces parece que estamos mirando a través de una mirilla a Cristina Salvador y Mario Patrón, actores que van creciendo minuto a minuto, y nos sentimos incómodos por entrar en ese espacio de su intimidad. Otras, sin embargo nos damos cuenta de que podríamos ser nosotros mismos los que caminamos por el salón, la cocina o el comedor de la casa de Julio Béjar. Salpicada de recursos propios de otros lenguajes, como el cine, el musical, la performance o la danza contemporánea, Cuando las canciones dejan de hablar de nosotros recuerda a las producciones de la Casa de la portera, que tan populares fueron hace unos años. Entre las muchas observaciones sobre la realidad que lanza el texto, tal vez la más llamativa por su inteligencia y mesura sea la constatación de cómo el feminismo está replanteando las relaciones heterosexuales desde la propia médula de éstas. La primavera pasada Julio Béjar estrenó en el Teatro Español y con una extraordinaria acogida del público 8,56. Esperemos que pronto podamos disfrutar también de Empieza por F. Mientras tanto, podemos acercarnos al Teatro de la Vida, en la calle Arganzuela 12. ¡Me han dicho que las entradas están volando!

Cuando las canciones dejan hablar de nosotros. Foto de Roberto Castar.

Vive Molière
Teatro de la Abadía. Hasta el 30 de diciembre
Álvaro Tato y Yayo Cáceres

Tras veinte años de experiencia en los escenarios, podemos afirmar que el dúo formado por Álvaro Tato y Yayo Cáceres ha renovado la manera de leer a los clásicos. Con Ron Lalá (integrada también por Juan Cañas, Íñigo Echevarría, Miguel Magdalena y Daniel Rovalher) siguen montando espectáculos gamberros en los que las referencias al Siglo de Oro se combinan también con guiños a la ciencia ficción y al humor absurdo. TIME al tiempo, Crimen y telón o Villa y Marte, un sainete de “chulapos mutantes” que podrá verse entre el 25 de diciembre y el 22 de enero en el Teatro Pavón, son buen ejemplo de ese espíritu desenfadado que les ha hecho tener un público fiel, de los que llenan noche tras noche patios de butacas. Pero Yayo Cáceres y Álvaro Tato, reunidos bajo la producción de Emilia Yagüe, lanzaron en 2018 un proyecto paralelo, Ay Teatro. Lo hicieron, entiendo, que con la voluntad de reivindicar a los grandes autores del canon universal, además de seguir arrancándonos sonrisas y carcajadas. Después de Malvivir (2021), que pudo verse el año pasado en las Naves de Matadero, ahora llega a la Abadía Vive Molière (2022), un biopic desternillante que recorre los momentos estelares del genio francés. La diosa de la fama se enamora locamente de él y le sigue en sus andanzas por el París del siglo XVII y la corte del Luis XIV, donde éste empieza su carrera como tapicero del rey. Con mucho de astracanada –ripios tan absurdos como geniales que recuerdan a los de Muñoz Seca-, y mucho de musical –Marta Estal canta y toca el piano con tanto donaire que a veces la obra parece una revista-, después de ver Vive Molière se sale con muchas ganas de comprarse las obras completas del genio francés o de suplicarle a este elenco de graciosos (Laura Ferrer, Mario Portillo, Kevin de la Rosa y Juan de Vera), que por favor, por favor, vuelvan a contarnos otra vez esta historia sobre la fama y la gloria.

Vive Molière. Foto David Ruiz.

La gran noche de los musicales
Beon Entertaiment
Teatro Amaya. Hasta el 23 de diciembre

La productora de El Medico, El tiempo entre costuras, Quién mató a Scherlock, Antoine: La increíble historia de El Principito y La Historia Interminable, ahora mismo en el Teatro Calderón, propone un viaje que comienza en los orígenes del teatro musical, con el mítico The Black Crook, y llega hasta nuestros días, ahora que la Gran Vía madrileña se ha convertido en una versión castiza de Broadway. Como si fuera un programa de televisión, cuatro presentadores dicharacheros van rompiendo los clichés que tantas veces se asocian al más popular de los géneros, con hooligans y haters incondicionales, dispuestos siempre a enzarzarse en una nueva trifulca. Me encuentro claramente entre los primeros y porque soy un defensor acérrimo y creo que volver a escuchar temas de Los miserables, compuesto por Claude-Michel Schönberg a partir de la novela homónimo de Víctor Hugo, Chicago, de John Kander, o West Side Story, de Leonard Bernstein, no sólo es un plan maravilloso para una tarde de lluvia, sino también un deber para los que todavía no han descubierto la magia de un espectáculo que aúna siempre música en directo y actores/cantantes/bailarines muy versátiles.

Luzia
Cirque du Soleil
Carpa Puerta del Ángel. Hasta el 22 de enero

El Circo del Sol lleva ya más de un mes en la Puerta del Ángel. Como todos los años visita Madrid con su nuevo espectáculo y las entradas se agotan tan rápido que debemos programarnos con antelación. Luzia es una de sus producciones más completas, con acróbatas, forzudos, contorsionistas, malabaristas, magos, clowns y músicos en directo. Ambientada en un México idealizado, evoca la migración de las mariposas monarca, que todos los años bajan desde los EEUU a principios del otoño, cuando se celebra por todo lo alto La noche de los muertos. Un paracaidista desorientado llega, empujado por el mismo viento que ayuda a estos lepidópteros a recorrer miles y miles de kilómetros, a un lugar misterioso en el que suceden cosas increíbles e inverosímiles. Pero atentos, porque todo, absolutamente todo lo que vemos bajo la carpa del Circo del Sol es real. He oído decir a algunos espectadores que este es uno de los espectáculos más impresionantes que han visto jamás y les doy la razón. Los efectos provocados por una cortina de agua, de la luz que vuelve visible lo invisible y del escenario en continuo movimiento -perfectamente sincronizado con los artistas- hacen que por muy duro que tengamos el corazón salgamos emocionados, conmovidos y extasiados de Luzia. Y este es el ciro verdadero.