Galería Veta by Fer Francés.

En torno a las paradas de metro de Urgel y Oporto, al otro lado del Río Manzanares, han abierto sus puertas varias galerías de arte. Atraídas por la amplia comunidad de creadores que tienen sus estudios en el distrito de Carabanchel, hoy trazan junto a estos un itinerario por la escena más contemporánea de Madrid.

Cuando se inauguren las ocho salas de exhibición previstas, Veta será una ciudad para el arte. Ubicada en una antigua fábrica de cocinas de la calle Antoñita Jiménez 37. Dentro de poco incorporará otros espacios, diseñados por el equipo de arquitectos RCR, entre los que también habrá una cafetería. No se trata de un museo, como me explica Fer Francés, el director de esta galería de arte que recuerda, por sus dimensiones, a las de Londres o Nueva York. Pero aunque Veta se dedique a la actividad comercial, también ofrece actividades que implican a los vecinos del barrio —me comenta que muchos se acercan todas las semanas para ver qué hay— y residencias para artistas que deseen pasar un temporada en Madrid. En una de las medianeras cercanas han financiado un gran mural realizado por Santiago Ydañez, el mismo artista al que ahora dedica dos salas bajo el título de El último baño. El pintor, que tiene como maestros a Tiziano, Goya y Velázquez —lo digo por su pincelada vibrante y suelta—, reproduce esta vez la imagen de hombres y mujeres en la playa que me recuerdan a las pin-up y los gigolos de las películas americanas. Para acompañar a la muestra, se ha cubierto el suelo con arena de playa, que evoca con nostalgia un verano que ya terminó hace unas semanas. Puede visitarse de martes a viernes de 11.00h a 20.00h y sábados de 11.00h a 14.00h.

Julio Galindo. Galería Veta by Fer Francés.

Justo en frente, en un solar que todavía conserva los muros semiderruidos de una antigua corrala, Veta presenta Post-Apocalipsis, una exposición a cielo descubierto de las cerámicas de Julio Galindo. Aunque resulte sorprendente, debe visitarse las noches de los miércoles, jueves y viernes de 21.00h a 22.30h. La imagen de estos animales salvajes entre las paredes desconchadas resulta sobrecogedora y bellísima a partes iguales.

La ruta continúa por la galería Sabrina Amrani, en la calle Sallabarry 52, que estos días muestra el trabajo del artista malgache Joël Andrianomearisoa: un delicado juego de letras y texturas en el que evoca su proceso creativo. Para introducirnos en el cerebro de un artista nuestro camino sigue al otro lado de General Ricardos. En Nicolás Morales 37 está Dan Benveniste, una imprenta artesanal que además tiene su propia colección de libros de artista (Mateo Maté, Marlon Azambuja o Ignasi Aballi entre muchos otros). En el mismo edificio se encuentra el estudio de René Francisco, que ahora mismo expone la última producción de sus obras, un conjunto de lienzos en los que unas cajetillas de fósforos evocan un futuro distópico.

Joël Andrianomearisoa. Galería Sabrina Amrani.

En el número 25 de la Avenida de Pedro Díaz se encuentran Mala Fama, con los estudios de Carlos Aires, Paula Anta, Gustavo Blanco Uribe, Alejandro Botubol, Pablo Linsambarth, Che Marchesi, Melissa Romero y Ben Vine, y la Nave Oporto, con los de Juan de Amdrés Arias, Virginia Frieyero, Raúl Hidalgo, Jimena Kato, Belén Rodríguez, Manuel Saro, Miguel Ángel Tornero, Irma Álvarez-Laviada, Elvira Amor, Nicolás Combarro, Marta Corsini, FOD, Miguel Fructuoso, William Gaber, Miki Leal, Ana Nance, Sonia Navarro, Beatriz Ruibal y Santiago Ydañez. Siempre que se hagan con respeto se pueden visitar.

Además Carabanchel tiene numerosas salas de ensayo para grupos de pop-rock, algunos garitos muy conocidos en la noche madrileña y cafeterías y restaurantes a la medida de esta comunidad de artistas. La cervecería La Fábrica de Patanel  o Matilda Bar Butacada son buenos ejemplos.

Exposición «El Último Baño» de Santiago Ydañezen. Falería Veta by Fer Francés.

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