«De mi Chueca natal»

Plaza de Chueca

Ante todo, una presentación: me llamo Abel y estaré por aquí aportando contenidos e ideas para este blog dedicado al colectivo LGTB, que quiero escribir desde el alma de un restaurador y un enamorado del sector. Soy catalán, hijo de inmigrantes de los años 60, pero con alma castiza. Descubrí esta inclinación cuando pisé por primera vez Madrid, y es que siempre sentí una especial atracción por la capital.

Barrio de Salamanca (©Madrid Destino)

¿Mi primera vez? Tenía tan solo 18 años. Vine a pasar un fin de semana con un grupo de amigos de toda la vida. Ninguno de nosotros había visitado nunca la ciudad y nos moríamos de ganas. Corrían finales de los noventa (uno ya tiene una edad) y estábamos emocionados porque era nuestro primer viaje de amigos sin supervisión de papá y mamá. Al llegar al aeropuerto de Barajas me di cuenta de que era una ciudad muy diferente a todo lo que había visto hasta entonces: se respiraba aire de grandeza. Al llegar a esa inmensa terminal sabía que estaba en otra ciudad, pero esa ciudad no me resultaba para nada ajena. Supongo que esa es la magia de Madrid…

Fuente de Cibeles (©Madrid Destino)

Llegamos al centro de Madrid, al Barrio de Salamanca, y se respiraba clase, saber estar, ese tipo de edificaciones señoriales que solo una ciudad como Madrid me podía enseñar. Era de noche y un amigo de nuestros padres vino a buscarnos con un gran coche y nos dijo literalmente: “Chicos estáis en Madrid, se hace de noche y hay que darse prisa antes de que desaparezca el sol”. No entendí las prisas, pero al realizar esa visita guiada por las mejores calles de Madrid mientras caía el sol, esa luz mágica que vestía la monumental Cibeles… nos dejó la boca abierta. En aquel mismo momento sentí que se me ponían los pelos de punta y dije: “Yo viviré en Madrid y quiero sentirme madrileño”. Mis amigos se rieron y dijeron que era demasiado barcelonés como para vivir en Madrid. ¡Qué equivocados estaban!

Hotel AC Santo Mauro

Muchos años después, y tras varios intentos fallidos de trasladarme a la ciudad y tras muchas visitas de fin de semana, tuve la oportunidad de mudarme por fin a mi soñado y amado Madrid. Empecé a trabajar en el AC Hotel Santo Mauro, donde estuve más de un año disfrutando de uno de los mejores hoteles de la ciudad y conociendo lo que era la beautiful people internacional y nacional.

Metro de La Latina

Mi suerte es que me instalé en La Latina y el camino que recorría todos los días del trabajo a casa me “obligaba” a pasar por Chueca; para mí el barrio más abierto a todas aquellas personas que quieren conocer otro Madrid: sus bares, sus gentes, su ambiente… Conocí un mundo nuevo lleno de galerías de arte, de tiendas alternativas y de restaurantes creativos sin un componente que siempre me ha crispado, el postureo.

Plaza de Chueca (©Madrid Destino)

De eso hace más de ocho años y poco después de haber empezado a conocer todo lo que Madrid podía ofrecer a una persona como yo empecé a usar una expresión que a día de hoy sigo usando cuando me preguntan: ¿de dónde eres? “Yo, de mi Chueca natal”.