Madrid se ha convertido en los últimos tiempos en una de las grandes capitales gastronómicas de Europa. Nuevos restaurantes abren sus puertas casi cada día y otros muchos cambian de aspecto. Pero también hay mercados, tiendas gourmet ¡y hasta espectáculos gastronómicos! Este otoño ha llegado repleto de sorpresas que no hay que perderse para estar al tanto de lo que se cuece en la ciudad. ¡Buen provecho!
EL MERCADO
Aunque el céntrico Mercado de San Miguel tiene más de cien años -fue inaugurado en 1916- otro aniversario está a punto de celebra. Fue en mayo de 2009 cuando el que es uno de los pocos edificios representativos de Madrid construido en hierro y cristal cambió totalmente de aspecto. Fue todo un pionero en esto de los nuevos templos gourmet. Tras él llegarían con un concepto muy similar, el de San Antón, en Chueca, el de Vallehermoso (¡el del anuncio de la Lotería de Navidad!), San Fernando y otros muchos que han revolucionado el concepto de mercado tradicional, donde se viene a comprar, sí, pero también a tomar unas cañas, unas tapas y hasta degustar cocina internacional.
Para celebrar su décimo aniversario el Mercado de San Miguel acoge desde este mismo mes nuevos puestos. Aunque los termómetros nos recuerden que el invierno esté cerca, los helados de Rocambolesc son toda una tentación. Llevan la firma de Jordi Roca, tres estrellas Michelin en el restaurante que regenta junto a sus hermanos en Girona (El Celler de Can Roca). Este maestro del dulce ha dado rienda suelta a su imaginación, con propuestas, que, aunque frías, gustarán a todos incluso en esta época del año. Los hay con cucurucho, en tarrina, envasados y también polos, como el Rocatocha, inspirado en la prominente nariz del autor, que es un sorbete de fresa con agua de rosas, o el Helado Oscuro, todo un homenaje a Star Wars, de arándanos con vainilla. ¡Hay que probarlos!
No es la de Jordi Roca la única estrella Michelin que ha llegado al mercado. También han abierto su propio espacio el chef mexicano Roberto Ruiz, que nos trae tacos y margaritas, Rodrigo de la Calle, que prepara todos los días paella y fideuà, y Ricardo Sanz, que se pone al frente de Kirei by Kabuki, donde es posible degustar una gran variedad de sushis y sashimis. Otro recién llegado, Arzábal, se ocupará de las dos barras centrales del mercado y de un carrito ¡repleto de croquetas! Las hay de gambas, de boletus, de jamón… ¡Están buenísimas!
LA TIENDA
Muy cerquita del Mercado de San Miguel, en plena Plaza Mayor, llama la atención una preciosa tienda que es puro color. Se llama Memories of Madrid y parece que ha dado en la clave: ha encontrado el souvenir perfecto de Madrid. ¿Y qué es? Pues una tortilla de patata ¡enlatada! Y lo mejor: está buenísima. Guillermo y Patricia son dos jóvenes emprendedores que después de mucho darle vueltas llegaron a la conclusión de que un poco de nuestra gastronomía más típica podría ser un buen recuerdo para quienes visitaran nuestra ciudad. Y no solo para ellos: muchos madrileños se acercan también a comprar su propia lata. Cada una de ellas lleva un año concreto, desde 1939 a 2018, para que cada cual elija la que prefiera. Cada año, además, viene acompañado de una efeméride y de algún personaje famoso nacido en esa fecha. Gracias a ellos he descubierto que soy de la misma quinta que Luis Figo y Zidane y que el año en que yo nací se inventó el Interrail.
La lata de 2018 es especial, con un único mensaje: yo estuve aquí. Dos son las preguntas que siempre se hacen los clientes: ¿y cómo se conservan? ¿Son con o sin cebolla? Ambas respuestas tienen mucho que ver: se conservan solo con aceite, nada de conservantes ni añadidos extraños, y solo las hay con cebolla, precisamente para que estén más jugosas. Además, todos los ingredientes son naturales. ¡Hay que probarlas! Es un regalo divertido, y rico, para estas fechas, y un buen recuerdo para añorar en la distancia a nuestra ciudad.
LA TABERNA
Viva Madrid es un local con solera junto al Teatro Español, en funcionamiento desde 1856, que acaba de reabrir sus puertas para acoger el nuevo proyecto del bartender Diego Cabrera. Firmado por el interiorista Lázaro Rosa-Violán, el espacio ofrece un formato inédito, que aúna ‘taberna inusual’ y coctelería con el objetivo de recuperar antiguas tradiciones en torno al aperitivo. En la carta, torreznos de lechón con vinagreta de pimienta negra, croquetas melosas de carrillada, banderillas… Para beber, medias combinaciones, sangrita y vermú. Por las noches, suenan música jazz y boleros. Diego Cabrera, argentino afincado en Madrid, es uno de los nombres clave de la coctelería madrileña que, además, está de enhorabuena. Su otro local en Madrid, Salmon Guru, en la calle Echegaray, ha sido incluido en la prestigiosa lista de los 50 mejores bares del mundo, que cada año elaboran los profesionales del sector.
EL BAR
El nombre de este bar recién inaugurado ya nos da una pista: Nada 365. ¿Y por qué 365? Pues porque esos serán los días exactos en los que permanezca abierto. Sí, estamos ante el primer bar efímero en la historia de la ciudad, que abrió en octubre de este 2018 y cerrará en octubre de 2019. Más original, imposible. Para encontrarlo hay que dirigirse a la calle del Barco, en Malasaña. Una vez dentro, atención nostálgicos, que tiene sorpresa. Nada 365 rinde homenaje a otro bar malasañero que hace apenas unos meses cerró sus puertas para siempre. Con él se fue parte de la historia de esta ciudad, después de 60 años en activo y una clientela fija, repleta de artistas e intelectuales… Hablamos de El Palentino, del que este nuevo bar recupera sus platos y pinchos más famosos. No faltan en la carta ni el pepito de ternera ni los bocatas de lomo con queso.
EL ESPECTÁCULO
Y, por fin, el espectáculo. Y no uno cualquiera ya que pretende terminar con la extendida costumbre del brunch y sustituirlo por algo más castizo. Que todo el mundo tome nota: el Teatro Flamenco de Madrid, dentro del Teatro Alfil, en la calle del Pez, organiza los Domingos de Vermú y Potaje. No ocurre todos los domingos, así que hay que estar atentos al calendario. Durante la obra, Maui, cantautora de Utrera, ejerce de anfitriona. Mientras canta prepara este tradicional plato en homenaje al popular Festival Flamenco que desde 1957 se celebra en su tierra y que surgió al amparo de largas veladas de vecinos en torno al potaje: la pócima ideal de la fiesta. Le acompaña la guitarra de Paco Soto junto a las palmas y el baile de Kiko Martín y Juan Carlos Gil. Además, otros artistas invitados como La Mari y su madrina artística, Martirio, también pasarán por ‘la cocina’, al igual que ya lo hizo Antonio Canales el día del estreno. Todos terminan en el patio de butacas interactuando con el público alrededor del potaje que elabora en paralelo a la Maui el chef del restaurante La Malaje. ¿La cita? A las 13:00 h.