Fotograma de Cómo te va querida (2019). Rels B y Don Patricio.

No es extraño que las calles y edificios de Madrid sean el escenario de algunos de los mejores videoclips de la música en español. Del diez al uno recorro en este post los que muestran mejor la ciudad, con canciones de amor y desamor, que van del pop al trap, pasando por el rock y los ritmos latinos. Y también alguna rareza que, aunque nos parezca increíble, está rodada aquí, como me han descubierto nuestros compañeros de Madrid Film Office.

10. Madrid (2010). Ariel Rot & Cabriolets.

En el puesto número diez la versión que Ariel Rot & The Cabrioletes hicieron del chotis de Agustín Lara para la Oficina de Turismo del Ayuntamiento de Madrid. Una Bimba Bosé gigantesca recorría las aceras de la Gran Vía a ritmo de rock & roll para celebrar en el año 2010 el centenario de la arteria madrileña, sin duda la calle más veces filmada de la ciudad. El Edificio Capitol es también el telón de fondo de grandes éxitos como Solamente tú (2010) de Pablo Alborán o Bailando por ahí (2011), de Juan Magán. Tampoco fue aquella la última vez que versionamos el conocido tema del compositor mexicano: en 2017, para promocionar el festival Flamenco Madrid, el mismo Ayuntamiento lanzó un vídeo que ha ganado numerosos premios nacionales e internacionales. Cuenta con un selecto grupo de bailaores y cantaores que lo dan todo moviendo lunares, mantones y volantes en lugares como El Retiro, la Estación de Atocha, Barajas, el Templo de Debod, La Latina, La cuesta de Moyano, la Plaza Mayor y por supuesto la Gran Vía.

9. Un, dos, tres…al escondite inglés (1969). Los Bravos, Fórmula V, Los Íberos…

Aunque no es un videoclip, la película de Iván Zulueta Un, dos, tres…al escondite inglés puso imágenes a la música que hacían muchas de las bandas yeyé del momento y lo hizo en algunos de los espacios más reconocibles de Madrid, como El Retiro, La Gran Vía, Plaza de España, la Ciudad Universitaria…. Hoy se considera un precedente de un género que tendría que esperar hasta los años ochenta para hacerse habitual en la pequeña pantalla. Un, dos, tres… cuenta la historia de unos aficionados a la música pop que deciden boicotear la canción que representará a España en el certamen Mundocanal, una parodia del festival Eurovisión que casualmente habíamos ganado el año anterior gracias a Massiel. Por supuesto que hay muy buenas películas musicales en los sesenta, como Los chicos, con las chicas  (1967) en las que el director Javier Aguirre muestra unos panorámicas espectaculares del Viaducto o la Plaza de Oriente, pero la cinta que incluyo en el top 9 se filmó como si fuera un videoclip, es decir con el ritmo y la libertad narrativa que los caracteriza. Hay quién ha visto influencia del Godard de La chinoise y del Kubrick de La naranja mecánica, y creo que están en lo cierto. Está incluso a años luz de las producciones de TVE en las décadas siguientes, como Mi ciudad (1975), de Cecilia, rodado en un autobús a cielo descubierto que circula por las calles de Madrid, o la actuación para el mítico programa de La Bola de Cristal de Los Nikis, que interpretan El imperio contrataca bajo el Monumento a Alfonso XII, igual que Fórmula V en este corte que he seleccionado: vedlos y os daréis cuenta de que las comparaciones son odiosas.

8. 32 escaleras (2017). Rulo y la Contrabanda con Dani Martín

Muchísimas bandas y cantantes españoles han elegido Madrid como escenario de sus vídeos, así que me ha costado sudor y lágrimas elegir el puesto número ocho. Finalmente me quedo con 32 escaleras de Rulo y la Contrabanda y con Dani Martín porque muestra toda la ciudad, desde arriba y al anochecer, como si tuviera un filtro de Instagram. Puestos a cantar en una azotea, tal y como hicieron los Beatles en su último y mítico concierto sobre el tejado del estudio de grabación Apple Corps, pues mejor elegir un edificio más alto y dejar a la fuente de inspiración por los suelos, así somos de chulos en la capital. Esa es la Torre Europa, en AZCA, y desde su cima vemos la Torre Picasso, la Torre BBVA, las Torres Kio, El Pirulí y el Paseo de la Castellana. Ganaron por metros, pero no por originalidad, ya que mucho antes, en 2002, Amaral había elegido también una azotea del barrio de Conde Duque para grabar el videoclip de su canción Salir corriendo; en 2005 Melendi había paseado sus rastas desde Avenida de América hasta Nuevos Ministerios, justo al lado del pequeño Manhattan madrileño, en su clip de Caminando por la vida; en 2008 El canto del Loco se subió a un taxi y al Teleférico en Eres tonto y en 2010 Coque Malla cantaba en solitario el conocido tema de Los Ronaldos No hay manera entre las cúpulas que coronan los chaflanes de la Gran Vía. A quién no le hace falta trepar hasta ningún sitio es a Rosendo, que es al rock patrio como los leones de la Cibeles: fuerza y empuje, aunque sigan desde hace 200 años en el mismo sitio. A pie de calle grabó las imágenes de Vergüenza torera en 2013, el año más duro de la anterior crisis.

7. Hablarán de ti y de mí (2017). Vanesa Martín

La elección resulta mucho más fácil si lo que valoramos es la dirección de arte y la ambientación histórica. Y el premio es para… Vanesa Martín y la canción que fue sintonía de la popular serie de televisión Las chicas del cable. Aquí volvemos a encontrarnos con la Gran Vía, pero una Gran Vía de los años veinte y treinta y la Estación de Delicias, que hoy es el actual Museo del ferrorcarril. No es sin embargo la primera vez que Madrid viaja en el tiempo. Por ejemplo, en 1984 Azul y negro grabó su video El hombre lobo en un Ateneo por el que pululaban los fantasmas del pasado y creo, aunque no he podido comprobarlo, que algunos planos del clip Hombre lobo en París de La Unión, de ese mismo año, están rodados en el Pasaje del Comercio, aunque parezcan la capital de Francia.

6. Embrujada (1983). Tino Casal

Si es difícil hablar de Madrid sin referirse a la Movida, resulta imposible referirse a la Movida sin tararear algún éxito del pop electrónico, que desde entonces no ha parado de reciclarse una y otra vez en la escena independiente de la Villa y Corte. La joya de la corona es el videoclip de Embrujada, en el que Tino Casal -a quien le encantaba lucir una aparatosa y sublime indumentaria- no aparece por ninguna parte. En su lugar hay un collage con imágenes de dibujos animados, películas de ficción, documentales y escenas grabadas en una ciudad por la que todavía circulaban los autobuses rojos y los edificios necesitaban una buena capa de pintura. Vemos que el metro ha mejorado mucho, pero aún así los que somos ya mayores echamos de menos ese aire de poblachón manchego con ínfulas de Camden Town. Mientras algunos de los veteranos de la Movida siguen evocando aquella época, como hace irónicamente Loquillo en su nueva versión del tema de Carlos Berlanga Rey del glam (2018), con un videoclip rodado en el Barrio de la Concepción, sus mejores herederos, sin embargo, muestran nuestros barrios tal y como son hoy. Tres ejemplos: Malasaña en Terrorismo (2013) de Algora, El Rastro y Callao en Supermán enamorado (2015) de Capitán Sunrise, y Lavapiés y el Cerro Almodóvar en Finally Floating (2018) de Hinds.

5. Cuarteles de invierno (2014). Vetusta Morla.

Si casi todo París cabe en el Pasaje del Comercio, buena parte de Madrid está en sus museos. Vetusta Morla decidió grabar el vídeo de su tema Cuarteles de invierno en el salón de baile del Lázaro Galdiano y el resultado es espectacular. Una imagen parecida es la que quisieron regalarnos el Museo del Romanticismo y del Museo Cerralbo cuando programaron durante varios años conciertos de pop-rock bajo el título de A las veinte cero cero. De aquellas veladas musicales surgió esta delicia del grupo Nerval (2016), tocando en las salas del primero. Y no ha sido la última vez, porque hace dos años el guitarrista Nayra se mimetizo con los mármoles y los dorados del palacio del marqués. Por su parte en 2017 Rozalén consideró que el solar del Campo de la Cebada, donde hoy se está levantando el polideportivo de La Latina (junto al mercado del mismo nombre), era el espacio cultural perfecto para mostrar al mundo Girasoles.

4. Digital Witness (2014). St. Vincent

A veces no es que toda la ciudad se condense en un lugar, es que los lugares más insospechados de Madrid se escondan entre los planos de los videoclips. En el enigmático Digital Witness, de la cantautora norteamericana St. Vincent, los nuevos ensanches a las afueras y una central de tratamiento de agua se transforman en una urbe retrofuturista que podría hacernos pensar en películas como Metrópolis, según ha desvelado su director, Chino Moya. Probablemente no sea nuestra mejor postal, porque muy pocos reconocerán algún edificio emblemático en estas imágenes, sin embargo no podía obviar en esta lista la que sin duda es la pieza más arty, la que podría colgar del mismo Museo Reina Sofía. Algo parecido hizo en 2016 BRBR con el clip Poems of Ramayana de Emelvi, que muestra un futuro distópico en el que se incluyen varios edificios de Madrid, como el Mirador de Sanchinarro, apodado el «donut». Aunque canten en inglés, también algunos de los vídeos de The perfect Kiss, como Trying your patience (2019), están rodados en Madrid. Esta vez, si prestamos mucha atención, podremos distinguir los bolardos con los que tantas veces hemos tropezado y el Reservado de la Casa de Campo. ¡Sus plátanos en otoño se ponen impresionantes! Del mismo modo las farolas fernandinas y los arcos del Viaducto de la calle Bailén, en el tema Capitán (2018) de Miss Cafeina, revelan que esta pesadilla infantil se rodó en Los Austrias. Lo que para casi todos pasará inadvertido en Indomable (2017), de Lorena Gómez, es el interior de la Estación de Príncipe Pío, la antigua Estación del Norte, puesto que hasta su reciente restauración ha estado cerrado al público. Podríamos decir que Xoel López hace exactamente lo contario en el videoclip de su canción Madrid (2018),  en el que se menciona todo el tiempo una ciudad que somos incapaces de ver a través de los cristales empañados de un coche en movimiento. ¡El concepto no está nada mal! ¿Pero les hizo falta grabarlo aquí o en realidad se trata de La Coruña?

3. Así estoy yo sin ti (1994). Joaquín Sabina

Como era de esperar aparece entre las primeras posiciones Joaquín Sabina, que no sólo ha escrito algunas de las mejores canciones sobre Madrid, con versos tan inverosímiles como «más triste que un torero / al otro lado del telón de acero» o «extraño como un pato en el Manzanares». Era el año 1994 y aunque había caído ya la URSS algunos no se lo creían. ¡Además todavía faltaban dos largas décadas para que se renaturalizara el cauce del río! Pese a estas incongruencias el vídeo es un sentido homenaje a las noches interminables de una ciudad en la que siempre es posible encontrar alguna barra de bar para ahogar las penas. Qué sí, que es un cliché, con la Luna, los adoquines, la gabardina, la Puerta del Sol, las cuadrigas que coronan el antiguo Banco Bilbao y todo lo demás, pero quién no ha acabado alguna vez de este modo. ¿O me vais a decir que no? En uno de los planos, Sabina sobrevuela la Castellana por el Puente de Enrique de la Mata Gorostizaga (que popularmente conocemos como Puente Eduardo Dato y bajo el que se encuentra el Museo de escultura al aire libre), el mismo que aparece en el vídeo de Caro diario de Javier Álvarez. Pero es imposible que ambos cantautores se hubiesen encontrado en este lugar, porque aunque el primero alarga su paseo vespertino hasta la madrugada el segundo no se despierta hasta las 10:42. ¡No viven mal estos artistas!

2. Te dejo Madrid (2002). Shakira.

Quién supo hacer algo radicalmente embriagador con los clichés fue Shakira, que en el año 2002 lanzó este videoclip que tergiversa y exagera todo lo que sabemos del arte de la tauromaquia en una de las producciones más kitsch de la música hispana (que ya es decir). Hay quien podría pensar que es muy malo, pero yo creo que se trata de uno de los mejores retratos que se han hecho de la ciudad: aparecen pintadas en un estilo metafísico que emula a De Chirico la Plaza de Toros de Las Ventas, la Arquería de Nuevos Ministerios, el Oso y el madroño, la Puerta de Alcalá, la Puerta de Europa y la Estación de Atocha. Las referencias culturales no acaban aquí, el matador se besa en el espejo como en un plano de La sangre de un poeta de Cocteau y usa dos lirios en lugar de banderillas en el segundo tercio, lo que parece propio de Miguel Hernández o Lorca, que tan bien supieron describir la lidia. Mientras, la cantante despierta envuelta en la bandera de España, se calza el traje de luces y se corta la melena en un guiño que replantea todos los roles de género y de identidad. Shakira, querida, con todo lo que nos hemos amado, ¿cómo es posible que nos abandonaras por Barcelona? Recientemente, otras grandes estrellas latinas también nos han echado el ojo. Madrid (2020), de Maluma y Myke Towers, comienza con un plano del Edificio Telefónica y la victoria alada del Edificio Metrópolis. Luego no vuelve a aparecer un palmo de la ciudad, pero os recomiendo que esperéis hasta que el cantante colombiano diga: «el baby y las babys, Maluma baby», porque entonces es imposible no perdonarle que nos haya dedicado tan poco metraje. Donde se nos ve mucho más es en Querer mejor (2019), de Juanes y Alessia Cara, con Malasaña, el Barrio de la Concepción y algún otro lugar que no he sabido distinguir. Y donde salimos como en un postal es en el último vídeo de Tini y Alejandro Sanz, Un beso en Madrid (2020), es decir un beso en en el Parque del Retiro (Palacio de Cristal, Monumento al Ángel Caído, Monumento a Alfonso XIII), en Callao, en el Templo de Debod, y en la Estación de Delicias, lugar que acoge una vez al mes el Mercado de Motores.

1. Tú me dejaste de querer (2020). C.Tangana

Aunque existen otros traperos y cantantes urbanos que han vuelto sus ojos hacia la ciudad, como pueden ser Rels B y Don Patricio en ¿Cómo te va querida? (2019), Innata en Hoy me faltas tú (2010) o Gata Cattana en Balzai (2017), el número uno sólo podía ser para un artista que se hace llamar «El madrileño» y que ha grabado muchos de sus videoclips en Madrid. C.Tangana es como una de esas asignaturas transversales, como la Línea 10 de metro o como los restaurantes de la cadena Vips en los que es posible encontrar de todo y a todo el mundo. En Comerte entera, publicado a mediados de enero de este año, aparece el Palacio Real, Lhardy y la Casa Carvajal, una de los ejemplos más sobresalientes de la arquitectura brutalista en Madrid; en Tiempo (2017), el Ecobulevar de Vallecas y Cuatro Torres Business Area y en Los chikos de Madriz (2016) el Monumento a Calvo Sotelo en la Plaza de Castilla. Yo me quedo sin embargo con Tú me dejaste de querer, no porque fuera el mejor debut en streaming de Spotify España -con más de un millón y medio de escuchas en sólo 24 horas-, sino porque el vídeo de Little Spain ofrece un paisaje reconocible a la vez que personal de un Madrid divisado desde la azotea del Hotel Riu del Edificio España que recuerda al del cine quinqui de los 70 -el Barrio del Carmen y la Colonia San Cristobal-, al del ambiente flamenco en el que se mueven La Húngara y El Niño de Elche (que le hacen los coros y más), y al de aquellos días del confinamiento de la primavera de 2020 en los que no había ni un alma por la calle: el Paseo de la Castallana vacío y con las Torres de Colón al fondo, que hace a penas unos días perdieron para siempre su capirote con forma de enchufe. En el top número uno, este videoclip rodado en Madrid que nace ya con toda la belleza de la nostalgia.

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